En Junín el COVID-19 causó crisis sanitaria, económica y social, por ello el proceso de vacunación es importante para enfrentar los riesgos en la salud pública derivados de la pandemia, principalmente en la disminución de la sobrecarga del sistema de salud para contener los casos graves de hospitalización. Los estragos que viene generando están asociados al decreciente acceso a los derechos económicos y sociales, con un impacto diferenciado y desproporcional en los diversos grupos en situación de vulnerabilidad.
En lo que va del 2021, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), el Producto Bruto Interno en Junín creció solo en 3,8%, además, según las proyecciones del Instituto Peruano de Economía (IPE) en la jurisdicción, la pobreza multidimensional alcanzaría al 27% de la población, es decir, más de 336 000 personas se encontrarían en esta situación de vulnerabilidad; a ello se suma que según el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, en la región Junín el empleo en el sector privado formal se redujo en 6,1% y la informalidad creció al 70%.
Asimismo, la Dirección Regional de Salud Junín (Diresa Junín) reporta más de 20 000 partos por año, de los cuales 3607 nacidos vivos entre el 2020 y 2021 no cuentan con el documento de identidad por los servicios restringidos durante los picos altos de la pandemia. Otro indicador desalentador es la salud mental, según la misma fuente, 3554 personas sufren alteraciones de salud mental, un 25% incrementó ansiedad, depresión y estrés.
Datos actualizados al mes de agosto de casos confirmados de contagios por COVID-19 en la región Junín arrojan la suma de 122 926, mostrando una curva oscilante que representa entre 80 a 90 nuevos casos diarios. Las provincias con mayor incidencia de casos son Huancayo (60 529), Satipo (15 781) y Chanchamayo (15 652). Bajo este escenario la Diresa Junín, en el marco del Plan Junín Libre de Coronavirus, logró inocular a la fecha con vacunas Pfizer y Sinopharm: (i) 423 804 personas con primera dosis, (ii) 361 239 personas con ambas dosis; así el 34.1% de la población total de Junín cuenta con la primera dosis de la vacuna y el 28.99% está totalmente inmunizado. Cabe precisar que las personas vacunadas tanto con primera y segunda dosis, son mayores de 28 años.
Sin embargo, aun siendo optimistas en el proceso de vacunación –entre primera y segunda dosis contamos con 785 043 vacunas aplicadas–, esto no es suficiente para proteger a la población regional. Por esta razón exhortamos a las personas acudan a vacunarse, pues pese a las campañas de cuidados difundidas por la Diresa, en Junín se confirmaron los primeros dieciséis casos de la variante Delta, los que fueron registrados en los distritos de Huancayo (3), El Tambo (6), Chilca (1), Huayucachi (2), Pilcomayo (2), y la Provincia de Chanchamayo (2), que a la fecha se encuentran aislados. Este escenario es preocupante por la capacidad resolutiva del sistema de salud en la región ante una eventual tercera ola; sumado a que un sector de la población sigue reaccionando negativamente respecto a las vacunas, sobre todo frente a Sinopharm, debido a una mala información.
Finalmente, insistimos con la población juninense en la urgente necesidad de cumplir con las dos dosis de vacunación para asegurar su efectividad. Según la Diresa, a pesar de todo lo mencionado, Junín es una de las regiones que más avanzó con el proceso de vacunación y generó un impacto positivo, la demanda de hospitalización ha disminuido en un 30 a 40%. Sin embargo, el tema sociocultural podría jugar en contra en una región altamente festiva, donde las celebraciones de distinta índole son cotidianas, lo que debería poner en alerta a las autoridades a fin de no bajar la guardia respecto a los protocolos de seguridad.
desco Opina – Regional / 3 de setiembre de 2021 descocentro