Autoras: Patricia Pinto A. / Delmy Poma B. / Kenny Caballero M
Con la promulgación de la ley n° 29338, que crea el Sistema Nacional de Gestión de los Recursos Hídricos (Sngrh), el Estado entiende que se tiene asegurada la gestión participativa del agua, donde todos los actores de las cuencas participan activamente para el aprovechamiento sostenible de ese recurso. Sin embargo, esto no funciona así, tal cual se muestra en el caso del presente artículo sobre la cuenca Quilca-Chili. El Sngrh adolece de muchos vacíos, como la rigidez en su representación, donde las organizaciones de la cuenca alta no tienen participación directa, pues más allá de las normas y de los problemas administrativos para la formalización, subyace aquí un problema de reconocimiento y de promoción de su derecho a la participación política en las decisiones que emanan desde el poder.